Hola… queridos amigos!
Espero hayan pasado unas placenteras Navidades, de la manera en que
cada quien eligió y que tengan todos un maravilloso y bendecido año 2014!
Durante hace mucho tiempo, los venezolanos estamos viviendo una
situación bastante crítica y preocupante, con respecto al tema de la
VIOLENCIA y la INSEGURIDAD, que va en
aumento cada día… Las noticias no son
nada alentadoras, para este año que estamos estrenando, con la trágica y sonada
masacre de la actriz Mónica Spear y su esposo. No solo por el hecho en sí, que
ya es bastante grotesco… más todavía, porque se consumó el delito, frente a una
niña de apenas 5 años… en realidad un hecho que no tiene calificativos y que
mantiene a toda Venezuela consternada y sumida en angustia, ansiedad, pánico y
en una cárcel emocional y psicológica, muy tóxica! … Obviamente, se hace más
sonado por tratarse de una actriz… pero hechos como este se repiten a diario,
de manera silente, en todas nuestras calles, pueblos, ciudades, etc…
A mi juicio, esta es la punta del iceberg, de una violencia que esta
en el bloque de hielo y que habría que buscar en cada uno de nosotros. La
violencia y la inseguridad afuera existen… y eso no es discutible, generada por
las múltiples razones y análisis, que a diario se hacen por expertos, por altas
autoridades, criminólogos, especialistas, etc… Y por supuesto ese es su trabajo
y todo esfuerzo que se haga “allá afuera”, es absolutamente plausible y
necesario.
Ahora bien… los que estamos en este trabajo de generar consciencia,
debemos ir más allá de todo lo medible, observable y cuantificable y buscar las
“causas” internas, que generan los “efectos” fuera… Y entonces ¿Por qué además
de criticar, enjuiciar, enviar cadenas, lamentarse, etc… no comenzamos a
hacernos las preguntas, sobre el violento que llevamos dentro?
Es un problema del Gobierno… cierto… sin embargo, nosotros… cada uno
de manera individual, puede ir trabajando para bajar los niveles de violencia
en nuestro círculo de influencia, en lo cotidiano, con nuestras reacciones, con
nuestras relaciones cercanas, con lo que enseñamos a los más pequeños….
¿Sabias que no dejar a los demás ser lo que son es violentarlo?
¿Sabias que pretender que los demás hagan lo que queremos, porque nos
conviene y es muy cómodo para nosotros es violentarlo?
Pretender que los hijos hagan lo que no se predica con el ejemplo… ¿no
es violencia?
Tener a los hijos como acompañantes de tu desolación y no dejarlos
crecer haciéndolos totalmente dependientes y cortando sus alas… ¿no es
violencia?
Tirarle el carro encima a alguien cuando trata de pasar una calle,
solo porque tu estas apurado… ¿no es violencia?
¿Cuántos sueños y deseos “Matamos”, “acribillamos” o “masacramos” en
nosotros y en los demás, por miedo a conseguirlos o a que los que amamos lo
consigan y se marchen?
Dejar sin respuesta a alguien, en una continua incertidumbre… ¿no es
violencia?
No tener la más mínima consciencia del sufrimiento y el dolor de los
animalitos y los niños en situación de calle… ¿no es violencia?
Criticar y enjuiciar a otros, sin saber nada de su pasado y su mundo
emocional… ¿no es violencia?
Proyectar tus resentimientos y asuntos no resueltos sobre los demás… ¿no
es violencia?´
Atender mal a un cliente, porque trabajas en un lugar que no te gusta,
haciendo lo que no te agrada, porque no has sabido que hacer contigo y tu vida…
¿no es violencia?
Ignorar a otros o excluirlos porque no son igual que tu, o piensan
diferente, o han elegido otros caminos… ¿no es violencia?
Decirles a los demás lo que tienen que hacer, sin que te lo hayan
pedido… ¿no es violencia?
Ponerle apodos y etiquetas a los demás… ¿no es violentarlo?
Y así… esta lista podría alargarse muchísimo más y podríamos enumerar
muchas actitudes, respuestas y comportamientos, que son solo responsabilidad
nuestra… que debemos trabajar cada quien de manera individual… darse el tiempo,
para meditar y pensar sobre lo que hago de manera violenta conmigo mismo y con
los demás… ¿No crees que por allí podríamos comenzar y que seria un hermoso trabajo de amor, por nosotros mismos y por Venezuela?
Somos energía… y creamos desde esa fuente… Recuerden que lo “que es
adentro… es afuera”… no somos inocentes frente a lo que estamos viendo… lo
estamos generando a diario con nuestras actitudes, con nuestras palabras, con
nuestros pensamientos de desamor hacia nosotros y los otros… ¿Qué mas tiene que
pasar para que cada uno se responsabilice por lo que genera?
Los invito a hacer, desde nuestro círculo de influencia… el trabajo de
amor por nuestro país y por el planeta… concentrémonos en conectarnos con
nuestro ser interior… el tiene muchas respuestas… Comencemos a tomar
consciencia de la vida que sostenemos en nuestras manos!
Por un año 2014, en el que crezcamos y nos responsabilicemos,
maduremos y le demos importancia a lo que verdaderamente lo tiene…
Hasta nuestro próximo encuentro!
Con amor,
Ondina Patricia Pilca
Psicoterapeuta/Coach profesional
@ondinapilca
(0414)2473383



